TRABAJAR CON LA FAMILIA Y AMIGOS
Trabajar con la familia, pareja o amigos es algo que ocurre muy a menudo en los restaurantes, en verdad, prácticamente en todos los sectores. Que levante la mano quien haya vivido este “ejercicio” aunque sea una vez en su vida.
En lo personal, lo viví varias veces, he trabajado con mi padre, con mi hermano, con amigas, con mi pareja, con sobrinos, con compañeros que luego terminaron siendo amigos entrañables. Cada una de estas vivencias fue distinta y única, de todas me llevo grandes aprendizajes, algunas fueron excelentes y otras complejas. Por ello te aconsejo que seas muy cuidadoso antes y durante la decisión que tomes.
Desde mi experiencia de las cosas que más rescato era el nivel de confianza y compañerismo. El tener días “malos” personales y poder compartirlo para sentirme comprendida si trabajaba a “media máquina”. También el coincidir con facilidad en los valores que como empresa queríamos transmitir.
A su vez, por momentos es arduo de llevar esta combinación. Cuando uno está dispuesto a esto, es fundamental no mentirse y esperar que sea sencillo. Ya que va a implicar una fuerza doble de cada parte, en dónde la buena comunicación, la paciencia y sobretodo los límites sanadores van a ser la clave para que esta fórmula funcione.
Creo que es posible y cuando esto se logra puede ser una unión espectacular! Puede producirse la mejor sinergia! Pero es muy importante, previamente, ser sinceros con nosotros mismos y evaluar si vamos a poder ser objetivos, no con todos los amigos o familia se puede laburar.
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